Tratamientos

Desgaste dentario. bruxismo

Soluciones para el desgaste dental

Ca­da vez es más fre­c­uen­te en la clíni­ca en­con­trar­se con per­so­nas que están des­gas­tan­do sus pie­zas den­ta­les. Es­te fac­tor de ries­go enor­me pa­ra la sa­lud de una bo­ca, mu­cha ve­ces pa­sa de­sa­per­ci­bi­do de­bi­do prin­ci­pal­men­te a que, a ve­ces, su­ce­de len­ta­men­te, con los años, y el pa­c­ien­te pien­sa que es «nor­mal» que es­to le su­ce­da. Además, el pro­p­io des­gas­te no sue­le es­tar acom­pañado de otros sínto­mas pa­ra el pa­c­ien­te.

Desgaste dentario y bruxismo

El desgaste dentario es un proceso multifactorial, esto se entiende así por el hecho que no existe un único factor responsable que explique, en todas las situaciones, el desgaste dentario y además existe una compleja interdependencia de los factores de este proceso en la severidad del desgaste.

El desgaste puede ser el resultado de tres procesos diferentes: la abrasión, desgaste producido por la interacción entre los elementos dentarios y otros materiales; atricción, desgaste producido solo entre los elementos dentarios; y erosión, desgaste de los tejidos duros por sustancias ácidas.

En este complejo sistema multifactorial se ha intentado evaluar la influencia de determinados factores en el desarrollo del proceso de desgaste de las piezas dentarias.Dentro de estos factores podemos evaluar los referentes a variables naturales como el sexo, alteraciones funcionales, alteraciones morfológicas, Ph del medio, parafunción como también variables culturales.

En un estudio epidemiológico los principales factores asociados con el desgaste oclusal fueron el bruxismo y el sexo masculino. También las variables morfológicas tanto de los maxilares como la inclinación palatina de los elementos superiores se han relacionado con el desgaste.

Siempre es conveniente iniciar el tratamiento lo antes posible

Si es­to le su­ce­de de­be es­tar aler­ta, ya que es un pro­ble­ma don­de la de­tec­ción tem­pra­na es im­pres­cin­di­ble pa­ra el man­te­ni­m­ien­to en con­di­c­io­nes de las es­truc­tu­ras de su bo­ca, ya que , a di­fe­ren­c­ia de una ca­r­ies por ejem­plo que se le re­a­li­za un em­pas­te y po­co más, el tra­ta­m­ien­to del bru­xis­mo es com­ple­jo, ca­ro y difícil

SOLUCIONAMOS TUS DUDAS
Preguntas frecuentes

Los síntomas comunes incluyen sensibilidad dental, dolor en los músculos faciales, mandíbula rígida, dolor de cabeza, desgaste dental visible, fracturas dentales, y dolor o incomodidad al masticar.

Los síntomas comunes incluyen sensibilidad dental, dolor en los músculos faciales, mandíbula rígida, dolor de cabeza, desgaste dental visible, fracturas dentales, y dolor o incomodidad al masticar.

Si experimentas dolor mandibular al despertar, tienes dientes desgastados, fracturados o sensibles, o si tu pareja te informa que rechinas los dientes mientras duermes, es posible que sufras de bruxismo y deberías consultar a un dentista.

Si experimentas dolor mandibular al despertar, tienes dientes desgastados, fracturados o sensibles, o si tu pareja te informa que rechinas los dientes mientras duermes, es posible que sufras de bruxismo y deberías consultar a un dentista.

 El desgaste dental no tratado puede provocar sensibilidad dental, pérdida de la estructura dental, daño en las encías y dificultad para masticar. El bruxismo no tratado puede ocasionar fracturas dentales, dolor en la mandíbula y músculos faciales, así como trastornos temporomandibulares (TMJ).

El tratamiento puede incluir el uso de protectores bucales nocturnos para prevenir el daño causado por el bruxismo, correcciones de la alineación dental, restauraciones dentales para reparar el desgaste y terapia para reducir el estrés y la ansiedad.

En algunos casos, el desgaste dental puede revertirse con tratamientos como la aplicación de selladores dentales o restauraciones dentales. Sin embargo, en casos más avanzados, puede requerir tratamientos más extensos.

Algunas medidas preventivas incluyen evitar morder objetos duros, practicar una buena higiene bucal, reducir el consumo de alimentos y bebidas ácidas, evitar el consumo excesivo de cafeína y alcohol, y buscar formas de reducir el estrés y la ansiedad.