Aunque son un problema bastante frecuente, no suelen precisar de tratamiento ya que se suelen curar entre una y dos semanas solas, pero muchas personas recurren a medicamentos o productos farmacéuticos para agilizar su curación y aliviar las molestias.

Algunas de las causas de estas llagas, comunes en niños y jóvenes, son las mordeduras accidentales al comer, la Ortodoncia, el tabaco o las alergias. Otras causas de las úlceras bucales también pueden ser los cambios hormonales y el nerviosismo o el estrés.

Sin embargo, los expertos señalan que se desconoce el motivo exacto por el que aparecen estas afecciones bucales, pero en algunos casos pueden estar indicándonos un problema de salud más concreto, como una carencia de vitaminas o minerales e incluso una intolerancia al gluten. Igualmente también apuntan a que alimentos como el chocolate, el café, el tomate, o algunos frutos secos pueden provocar llagas en la boca.

Aunque normalmente, si las llagas no tienen origen en enfermedades u deficiencias no tienen un tratamiento específico, limpiar suavemente la boca y los dientes puede ayudar a aliviar las molestias que ocasionan. El uso de algunos medicamentos también pueden mejorar el malestar. 

Si las aftas se producen con frecuencia, no se ha curado sola tras dos semanas o si la llaga es de gran tamaño o dolorosa es recomendable acudir al médico.